Con el verano a la vuelta de la esquina el calor amenaza al verdor de los jardines y terrazas.
En este Blog C21 te damos tips para que tu jardín no se seque y que el clásico dicho “el pasto del vecino siempre es más bonito” no se haga realidad.
Lo primero —y quizás lo más importante— es regar las plantas y el pasto. Dada la escasez hídrica a la que se enfrenta Chile debemos ser cuidadosos con la forma en que lo hacemos. Por ejemplo, no es recomendable “inundar” las plantas, puesto que las raíces se pudren y mueren. Además, estamos desperdiciando agua.
Por otro lado, el horario para regar también es relevante. El pasto debiese regarse tres veces al día cuando está recién plantado, pero sí o sí, hay que evitar hacerlo durante los horarios de más exposición al sol —11 AM a 15 PM— porque podemos quemarlo y el calor evapora el agua antes de llegar a la raíz. Un dato a considerar es que algunos municipios del país están reduciendo su consumo de agua para riego reemplazando el pasto por gravilla y piedras, con resultados estéticamente interesantes.
Una excelente idea para tener un jardín sano es abonarlo con compost, de esta forma podemos aprovechar los restos orgánicos que generamos en casa. Las composteras son fáciles de hacer, pero también se encuentran en el mercado en variadas formas y precios. Si el “hágalo usted mismo” no te acomoda, puedes encontrar el compost ya hecho en diferentes tiendas de jardín e internet.
Para avanzar hacia un jardín más sustentable, los expertos recomiendan usar plantas nativas de la región en la que estás, ya que están acostumbradas a las condiciones climáticas del lugar y no necesitan mucho más cuidado, además, al ser endémicas colaboran con la preservación de la fauna nativa. Igualmente, al plantar frutas, verduras y hierbas aromáticas ayudas a aumentar la biodiversidad de tu jardín en una especie de huerta urbana. Así tendrás productos que puedes consumir directamente de tu casa.
Estudios prueban que el contacto con la naturaleza o al menos tener un pequeño espacio verde propio entregan grandes beneficios a la salud mental. La pandemia coartó la posibilidad de muchas personas de acceder a áreas verdes, viéndose obligados a mantenerse encerrados en un departamento durante las cuarentenas. Es por esto que tener un jardín o huerto urbano se ve como una buena oportunidad para cuidar nuestra mente.
Tu jardín —por más grande o pequeño que sea— puede llegar a ser un espacio de conexión contigo mismo, con estos datos esperamos que puedas dar un paso más en el camino hacia tu huerta urbana, almaciguera de balcón, jardín florido o patio más bonito que el del vecino.
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